miércoles, 13 de enero de 2016

De cómo enganchar a tu madre en los juegos de mesa con Toma 6!


¡Toma 6! siempre me ha parecido un juego muy divertido, pero nunca había salido de la "friend-zone" hasta que casi sin darme cuenta, llegue a la conclusión de que es el mejor juego para que tu madre se enganche a jugar a juegos de mesa. Veréis porqué:
¡Toma 6! es un juego de cartas, de lo más simple. 104 cartas numeradas del 1 al 104, con una serie de cabezas de buey impresas en cada carta. En función de si es múltiplo de 5, de 10 o de 11 tiene más o menos cabezas.


Se reparten 10 cartas a cada jugador, y se colocan 4 en el centro de la mesa. Todos los jugadores eligen una carta de su mano y la colocan boca abajo delante de sí para darle la vuelta todos a la vez.
Quien tenga el número más bajo es el primero en colocar su carta en las que están en la mesa, en fila, colocándola en la que se sitúe más próxima por debajo de ella. El siguiente será quien hubiera tenido la segunda más baja, y así sucesivamente.

Aunque el 79 estás más cerca del 76 que ha sacado el jugador, la colocación debe ser al más cercano por debajo. En este caso el 2.

De esta forma, van creciendo las filas hasta que haya 6 en una de ellas. El jugador que haya colocado esa sexta carta, se queda con todas las previas, dejando su carta como la única en esa fila. Las otras cinco cartas las coloca aparte porque no se usan hasta el final de la ronda (cuidado con no mezclar las que te has llevado con las que tienes en mano).
Una vez hemos bajado las diez cartas que teníamos en la mano, se cuentan las cabezas de bueyes de las cartas que nos hayamos llevado con anterioridad. El que tenga más cabezas es quien pierde.

El 1 es más baja que todas las últimas cartas de las filas, por lo que no se puede colocar en orden. El jugador elije una fila y toma todas las cartas de ella. En este caso parece más lógico coger la última fila (carta 103) porque aporta sólo una cabeza de buey (un punto), pero en ocasiones conviene coger otras filas para fastidiar al que venga detrás.

¿Y qué ocurre si saco una carta más baja que todas las que están en mesa? De nuevo el que saque la carta más baja es el primero en poner, pero en esta ocasión debe elegir una de las filas, llevarse lo que haya en ella, y colocar su carta en dicho lugar.

COMPETENCIAS BÁSICAS.

Todos los que nos gusta este mundo de los juegos de mesa, estamos obsesionados con encontrar un eurogame con una mecánica de estas que te dejan boquiabiertos, bien pensada y elaborada. O los que son más de juegos temáticos, buscan una buena trama, y unas miniaturas que quiten el hipo, o los de abstractos, juegos que te hagan pensar hasta que salga humo por las orejas... y de repente nos ponen esto por delante... No hay juego más simple y que desconcierte más. Siempre que lo explico, todo el mundo me dice: 
-¿Y qué más?
+Ya está.
-¿Ya? Pos vaya.

Yo también lo pensé la primera vez, pero lo bueno de este juego es que es imposible resistirse a jugar, y con ello, entrar en este maravilloso mundo de los juegos de mesa e incluso seguir avanzando.
No me había dado cuenta hasta hace poco, y no porque no me haya pasado veces que la madre de un amigo, mi suegra o la novia anti-jugona de otro haya dicho rotundamente "a mi no me gusta jugar, así que yo si eso os miro y ya esta"... y termina jugando.
Es por ello uno de mis preferidos para jugar cuando sé que en el grupo va a haber una persona mayor.
Unas reglas simples, unas partidas ágiles y rápidas hacen de este juego irresistible.
Un tamaño y un precio muy ajustado hacen el resto.
Además de todo esto, puede resultar una buena terapia para que nuestros mayores mantengan la mente activa y ejercitada.

Competencias que desarrolla
  • Competencia matemática
  •  Tratamiento de la información
  •  Las propias de los juegos de mesa

LO MEJOR

Bueno, bonito, barato.
Enganchará a quien quieras. 
Imposible resistirse.

LO PEOR

No saber cuando hay que parar. Nosotros jugamos partidas a 66 puntos, siendo el que más sobrepase 66 quien pierde, pero nunca sabemos cuando dejarlo.
Aparentemente es un juego donde no sale Cthulu o que no firma Stephan Feld o Uwe Rossemberg. Tampoco es de Star Wars o de Zombies, y encima las cartas son casi todas iguales, por lo que tiene pinta de ser aburridísimo, pero para empezar sólo hay que rascar.



8 comentarios:

  1. Yo suelo jugar a rondas, en lugar de puntos. Tantas rondas como jugadores haya. Más jugadores, más rondas. Como normalmente solemos jugar 5-6, va bien siempre.

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    1. Pues también es una opción. Lo difícil al final es ser capaz de jugar SÓLO las rondas estipuladas. Al final siempre se anima uno a jugar más.
      Gracias por pasarte a comentar.

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  2. Lo único malo que se puede decir de él es que a pocos jugadores no funciona. Yo solo lo saco si en mesa al menos somos 5. A muchos jugadores es un desfase riquísimo! A veces no sabes si jugar en modo aleatorio porque, por mucho que sopeses, al final comes :P

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    1. Es cierto que es más divertido con más gente, pero tampoco creo que no funcione a 4, o incluso 3. Eso sí, hay mayor control, y por tanto se pierde el efecto caos. Depende de la gente que meta la suegra en casa, jeje.
      Gracias por comentar Ivan.

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  3. Jaja. Muy bueno. Te ha faltado decir que la novia anti-jugona termina ganando la partida.

    En serio, muy buen juego de esos de sacar en las pos-cenas de las reuniones de amigos (todo no va a ser GoT y Civilization). Rápidez, claridad, sencillez y risas. ¿Qué más se puede pedir para un sábado por la noche?

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    1. Totalmente cierto. Al final ganó la novia no jugona, jeje...
      Lo único que puedes pedir de más para el sábado por la noche son bocadillos para cenar.

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  4. Recupero la entrada porque hemos echado uno este fin de semana y las sensaciones han sido, como no podía ser de otra manera, las que se podían esperar: suspense, tensión y diversión en cantidad.

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